Alimentos no saludables

alimentos no saludables

Alimentos no saludables

Igual que en otro post estuvimos hablando de los alimentos que podían, y de hecho, mejoraban nuestro ánimo, aspecto físico y salud en general, podemos encontrar otros que no nos ayudan nada a mantener nuestra salud o buen estilo de vida. Las consecuencias a largo, y no tan largo plazo pueden ser muy negativas. Hoy hablaremos de los alimentos no saludables.


Veamos un listado por encima de los alimentos a evitar en nuestro plan de alimentación habitual:


  • Conservantes y colorantes

Desde trastornos por déficit de atención con hiperactividad en niños a alergias, pasando por anemias, hipertiroidismo o alta toxicidad. Son muchos los estudios que han relacionado determinados colorantes con todo este tipo de patologías o consecuencias negativas para la salud de los consumidores.


Derivados al consumo de los conservantes más habituales en el mercado podemos encontrar efectos negativos como  riesgo de formación de compuestos cancerígenos, irritaciones de mucosas, hipersensibilidades, alergias…


Por supuesto estos son solo una parte de las consecuencias de un consumo mantenido en el tiempo… De todas formas que no cunda el pánico, los aditivos añadidos a los alimentos están muy controlados y regulados por la Unión Europea, y como digo para causar efectos muy nocivos el consumo de éstos debe ser muy por encima de las cantidades recomendadas.


  • Alcohol

Puede provocarnos problemas cardíacos, daños en estómago, páncreas e hígado, incluso diversos tipos de cánceres relacionados con órganos del aparato digestivo. Puede empeorar o incluso perder relaciones personales o familiares.


Causa en hombres, problemas de erección. En general puede provocar problemas de sueño, y aumento de riesgo de suicidio. Por supuesto no hablemos de alcohol + conducción…

Razones, como vemos, hay de sobra.


  • Carnes rojas o embutidos

En nuestra lista de alimentos no saludables, hablaremos en tercer lugar de las carnes rojas y embutidos. Nuestra prioridad debe ser consumir carnes, (si las consumimos) cuanto menos procesadas mejor.


Uno de los grandes problemas de este tipo de “alimentos” es la cantidad de sodio o sal que llevan. Para su conservación añaden además nitratos, que pueden convertirse en nitritos que conllevan riesgo para la salud.

Aumentos de colesterol, triglicéridos o acumulación de grasa son algunas otras de las consecuencias que podemos encontrarnos.

Según la OMS hay suficiente evidencia de la relación entre carne procesada y desarrollo de algunos cánceres. ¡A mí me han convencido!


  • Azúcar

Numerosos expertos relacionan el azúcar refinado (el modificado y utilizado por la industria alimentaria) con sobrepeso, ciertos tipos de cáncer, problemas cardiovasculares y diabetes.


Son productos que generan un alto poco de insulina en el organismo, lo que propicia entre otras cosas que nos entre hambre al poco de tomar estos alimentos, y además que se deposite mucha más grasa en nuestro cuerpo. Son productos que difícilmente puedes parar de comer.. a quién no le ha ocurrido de abrir cualquier caja de galletas o bollos, y no poder parar hasta terminar con ellos!


  • Bebidas carbonatadas y azucaradas

Estudios en América relacionan que el consumo de bebidas gaseosas y dulces se relaciona con mayor riesgo de muerte por diferentes enfermedades, entre las que aparece el cáncer. El consumo de estas bebidas azucaradas tendrá como consecuencia un aumento de peso y riesgo de diabetes tipo II.


Además, muchos expertos afirman que las consecuencias del consumo de bebidas endulzadas artificialmente (no azucaradas, todo este tipo de refrescos light o Zero) no se conocen, y que por tanto tampoco se puede asegurar que sean inocuas para la salud. También hay que tener en cuenta las cantidades: de vez en cuando no habrá problemas!


  • Golosinas o chucherías

Además de, obviamente, nuestra salud bucal (la realidad absoluta de que se piquen nuestros dientes), las golosinas poseen gran cantidad de sodio, colorantes y conservantes artificiales, junto con saborizantes, que tampoco son muy naturales que digamos.


Son una fuente de calorías vacías, es decir, productos alimenticios (no lo llamaremos ni alimentos) que no aportan nada, solo azúcar (al alcohol también se lo mete en este saco) con lo que no proporciona a nuestro organismo nada salvo eso, azúcar!


  • Patatas chips y similar

Además del uso de aditivos que hacen este tipo de productos adictivos, el hecho de estar totalmente ausentes de fibra nos hace no saciarnos nada de nada (no solo seremos capaces de comernos el paquete entero por la primera razón, si no que al poco rato volvemos a tener hambre! es algo un poco sin sentido..).


En la elaboración de estos Snacks tipo chips, se forma un compuesto cancerígeno que seguro os suena: acrilamidas. Esta sustancia no es única en las patatas, pero las cantidades en las que se consume hace que se eleve su peligrosidad.


Su alta cantidad de sal añadida provoca problemas cardiovasculares (además de engancharnos aún más si cabe a comer mayores cantidades), además de producir tras su consumo en nuestro organismo un pico de azúcar que puede ocasionar diabetes.


Por supuesto también de todos es sabido, que las grasas ingeridas con todo este tipo de snacks, por su rápida asimilación, provocan un aumento de masa grasa en nuestro organismo. Se irá directamente al michelín!


  • Postres azucarados

Porque ni meterlo en el saco de los lácteos podemos. Flanes, natillas, postres de chocolate… No aportan apenas nutrientes a nuestro organismo con unas cantidades demasiado elevadas de azúcares. Lo peor de este tipo de productos es que de forma habitual se suelen ofrecer a los niños y jóvenes, incrementando en exceso su consumo de grasa y azúcar, así como educando a su paladar a alimentos taaaaaan dulces, que ya todo les parecerá poco.


  • Bollería industrial

No sé siquiera si hablar de ella. Grasas, harinas refinadas, azúcar, aceite de pésima calidad y a temperaturas tan elevadas que el incremento de peso derivado de su consumo es hasta una consecuencia insignificativa. Pasa en este caso como el ejemplo anterior, muy habitual en niños y jóvenes, el c0nsumo de estas… cosas con forma de alimento. Además de salud y peso, otro problema es los alimentos de verdad que se dejan a un lado por desayunar o merendar esta bollería o dulces prefabricados. Donde esté un buen bocadillo de queso, pavo (del de verdad), atún o incluso aceite (por favor, del bueno)… para mí no hay titubeo. Esta “comida” es de los peores alimentos perjudiciales que podemos encontrarnos.


Como siempre digo, no es eliminar completamente este tipo de productos, bebidas o aditivos de tu alimentación, si no limitarlos a momentos concretos y puntuales. Cuando tengas de verdad ganas de uno de ellos disfrútalo, pero sabiendo los pros y los contras de su consumo.