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Dieta disociada
Últimamente ya no se escucha
tanto sobre la dieta disociada, pero durante un tiempo estuvo de moda esta loca dieta.
Quiero abordar este tema porque, dejando aparte el tipo de dieta, siempre cada X tiempo se pone de moda un tipo de dieta que, según se afirma, será la definitiva y te hará perder el peso que te sobra rápido, sin rebotes y por supuesto sin ningún esfuerzo. Y como podrás
imaginar esto no lleva a absolutamente nada.
¿Qué es la dieta disociada?
La dieta disociada es una planificación dietética que se basa en la idea de no mezclar diferentes alimentos en una misma comida.
Es decir, no mezclar alimentos ricos en proteínas (pescado, carne..) con hidratos de carbono (pasta, pan, legumbres). Ni mezclar grasas (frutos secos, aceite) con proteínas. La única excepción son los huevos.
Hay una serie de alimentos neutros que permiten mayor combinación: verduras, grasas vegetales, pescados crudos o ahumados…
La idea es que el organismo no está preparado para digerir y metabolizar diferentes macronutrientes a la vez, haciéndonos almacenar azúcar en el cuerpo, grasa y hacernos por tanto engordar.
Para ello tienen una tabla de alimentos en las que, por filas y por columnas y según el alimento que vas a tomar indica si sí es adecuado o si por el contrario es desaconsejado la toma conjunta.
Pautas para la dieta disociada:
- Mezclar alimentos engorda.
- Mezclar alimentos dificulta la digestión.
- Mezclar alimentos es poco saludables para el organismo.
- Al no mezclar alimentos, obliga al organismo a utilizar su grasa de reserva y adelgazar por ello.
- No mezclar diferentes tipos de HC entre sí
- La fruta siempre tiene que ser tomada separada de las comidas, y no mezclar diferentes tipos entre sí.
- Nueces no se pueden mezclar con otros alimentos.
Posibles riesgos:
·
Puede provocar picos de ansiedad que den lugar a
deseos de comer determinados platos con mezclas “prohibidas”.
·
Puede tener riesgo de provocar carencias
nutricionales.
Estudios relacionados
Podemos consultar un estudio recogido por Luis Jiménez en los que los participantes fueron separados en dos grupos. Ambos grupos tenían los mismos alimentos con la diferencia que a uno mezclaron nutrientes y en el otro se los disoció. No hubo ninguna ventaja ni en pérdida de peso ni en mejora o empeoramiento de la salud en ninguno de los grupos.
Otro estudio publicado por científicos de Bélgica demostró que las enzimas de nuestro organismo actúan con simultaneidad, pudiendo digerir al mismo tiempo diferentes macronutrientes como proteínas e hidratos de carbono a la vez.
Un último estudio que mostramos, publicado en la International Journal of Obesity, afirmó que la combinación de alimentos no influye en ninguna medida en la pérdida de peso.
Conclusiones
El objetivo de la dieta disociada es muy difícil de conseguir, ya que no hay alimentos compuestos únicamente por un macronutriente, si no que casi todos tienen una mezcla de 2 o incluso de los 3 (proteína, grasa y carbohidrato).
Además no tiene sentido biológico, ya que siempre se ha seguido una dieta combinada de proteína+hidratos u otras combinaciones, en toda la historia.
¿Por qué entonces pueden funcionar y en muchos casos conseguir una pérdida de peso?
La primera razón es que provocan un déficit calórico, tanto por restricción de algunos alimentos como prohibición de otros (bebidas azucaradas, azúcar, algunas grasas…). La segunda razón es que, dietas tan poco flexibles, son aburridas y tediosas de preparar, lo que provocará que se consuman menores cantidades de alimentos.